Era el lenguaje habitual de nuestros abuelos...
"La palabra actúa , no como fuerza ideal, sino como una fuerza oscura, como un hechizo que constriñe las cosas, las hace realmente presente fuera de ellas mismas."
M. Blanchot.
ABRUSCAR: caerse de morros.
ALBULTO: persona que actúa irreflexivamente, por corazonada.
ACERICO: almohadilla para clavar en ella agujas y alfileres.
ACHANCHADO: desmejorado, venido a menos.
ACHUSMAR: asomar.
ACABOSE: se emplea para decir que eres el colmo.
ACARREAR: transportar mercancias sobre un carro.
ACOCHAMBADO: cómplice de una accción deshonesta o ilegal.
ACARTONADA: persona que envejece seca y delgada.
ADEFESIO: esperpento, espantajo, mamarracho, rídiculo, grotesco, (también es una obra de R. Alberti).
AGOSTERO: se llamaba así a los obreros que venían a realizar las tareas del campo durante el verano.
AGUADERAS: utencilios de mimbre o esparto que se ponían encima del burro o caballo y sobre el que se colocaban los cántaros de agua.
ADEREZO: conjunto de joyas que venían a juego, (pendientes, collar, pulsera...).
AGUINALDO: donativo navideño que se daba, especialmente a los chiquillos, que iban cantando villancicos por las casas y calles.
AEROPLANO DE RÍO: popularmente se les dice a las libélulas.
AFILADOR: oficio antiguo, cuya persona, provista de una rueda movida pedales y, por lo general, adosada a una bicicleta mediante un artilugio, afilaba: navajas, cuchillos, tijeras...
AJORCA: brazalete, pulsera...
ALAMPAR: se decía cuando algo picaba mucho...
Continuará.
Fuente:
Biblioteca Pública de Burgos
Junta de Castilla y León.
Fuente:
Biblioteca Pública de Burgos
Junta de Castilla y León.