Hoy celebramos el Día de la Música. El ritmo forma parte de nuestra vida desde la Prehistoria.
Hoy me parece apropiado traeros a un conjunto mitíco, que formó parte de nuestras vidas, entre otros. Fue de lo más memorable en la etapa de nuestra Transición. Tiempos difíciles, pero existía una juventud con ideas muy claras y firmes, luchadora que supieron llegar a sus logros, entre todos.
Me estoy refiriendo al conjunto: JARCHA. Yo era muy jovencita, pero me conquistaron su manera hacer. Nos dejó un valioso e imborrable legado. Hoy les brindo mi homenaje, muy sentido.
Por último, como broche de oro, terminaré con mi primo, Antonio Ángel Ligero, uno de los solistas del grupo y un gran virtuoso con las castañuelas. Sigue trabajando actualmente por amar profundamente el ARTE, con mayúsculas, por supuesto...