Los sevillanos sabemos que detrás de la cigüeña viene la cruz de guía, y en cuanto aparece la zancuda ya estamos con el ¡Ya huele a Semana Santa! Y para julio nadie dice ¡Ya huele a Chipiona!
También se lo pasa bomba el forofo con el arduo trabajo que empieza con la letra mayúscula T, que es la cruz de guía de las palabras: Tramo, Trompeta, Trasera, Trabajadera y Trancazo...
Los niños, en las Cruces de Mayo, ensayan a ser futuros cofrades, que aún hoy siguen con la tradición, así se les va metiendo en el grupo sanguíneo el RH positivo de la Semana Santa, no ni ná...
En las vísperas de la Semana Mayor llaman a las puertas de los templos los ángeles custodios de los nazarenos y se despabilan los pabilos de toítos los cirios durmientes que invernaban; que los gordos cirios son como gusanos de luz que se han tragado la vara de un prioste.
El Domingo de Ramos es el domingo con más mingo en Sevilla. Si todos los domingos son festivos, el de Ramos es festivo elevado al cuadrado, al cubo, la repera vamos. Toda Sevilla está de fiesta, de un contento que no se da en otras fechas. Sevilla está de dulce y no es sólo por la miel de las torrijas y pestiños, sino por la explosión de júbilo popular: ¡Ya huele a Semana Santa! Coronada por la deliciosa y penetrante fragancia de las flores de azahar.
No esperes, seguidor, que te la describa, muchísimos poetas lo han hecho ya y muy bien y lo seguirán haciendo, por los siglos de los siglos amém. A lo más que me atrevo es a recordar al señor Bécquer, don Gustavo Adolfo, e iniciar con pudor el pórtico semanasantero:
Volverán los oscuros nazarenos
Por esas calles de nuevo a pasar
Y otra vez con el cirio, tus ropas
nuevas te la mancharán...
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| Internet. Las últimas imágenes son de la autora, hechas en los escaparates de la Confitría La Campana: Plaza de La Campana, esquina a calle Sierpes. |