El proyecto del “Elcano” comenzó a tomar forma en 1923, cuando el 6
de abril el Ministerio de Marina firma un contrato con D. Horacio
Echevarrieta y Maruri para habilitar el motovelero “Minerva” como buque
de Guardias Marinas. Al año siguiente, un Real Decreto de 30 de junio
autoriza a dicho Ministerio a proceder a la renovación de dicho contrato
en el sentido de construir un nuevo buque destinado a tal fin.
El proyecto estaba ya en marcha. Una vez la Armada dio su visto bueno, se dispuso la construcción de un nuevo “Minerva” con arreglo al proyecto del ingeniero inglés Mr. Charles V. Nicholson en los astilleros Echevarrieta y Larrinaga de Cádiz, y se le colocó la quilla el 24 de noviembre de 1925. Presenciaron el acto el Infante D. Carlos, el General Primo de Rivera, el Capitán General de Cádiz D. Pedro Mercader y otras autoridades. En el transcurso del mismo Don Horacio Echevarrieta expresó al General Miguel Primo de Rivera su deseo de que el barco llevase el nombre de “Juan Sebastián de Elcano”. Éste prometió solicitar dicha petición al Rey Alfonso XIII, prosperando finalmente su propuesta.
Con ese nombre, surgido de una conversación entre el ingeniero constructor y el Presidente del Gobierno, se procedió a la botadura del barco el 5 de marzo de 1927, siendo Madrina Carmen Primo de Rivera, hija del General. Cuatro siglos después de su muerte en 1526, el marino de Guetaria obtenía uno de sus más hermosos homenajes, tras haber realizado la gesta de dar la primera vuelta al mundo entre los años 1519 y 1522.
Una vez botado, el 19 de abril de 1928 sale a la mar para llevar a cabo lo que sería su primer crucero de instrucción, que desde entonces realizará casi sin interrupción cada año. En los años 1937, 1938 y 1939 no se pudo realizar el viaje como consecuencia de la guerra civil española. Asimismo en el año 1956 y posteriormente en 1978 el buque fue objeto de grandes obras de modernización en el Arsenal de La Carraca y no pudo efectuar navegaciones con Guardias Marinas. Por el contrario, en 1933, 1942, 1943 y 1951 el “Elcano” realizó dos cruceros diferentes en cada uno de esos años. De ahí que en la actualidad coincidan prácticamente el número de cruceros realizados y la edad del barco.
Por otro lado, de septiembre de 2001 a marzo 2002, de julio de 2005 a febrero de 2006, y de mayo de 2011 a marzo de 2012, se han realizado importantes obras de modificación para mejoras de habitabilidad, calidad de vida, cambio de la planta eléctrica y saneamiento de la estructura de la cámara de máquinas.
Hasta el presente año 2013, el “Elcano” ha realizado ochenta y cuatro cruceros de instrucción, la mayoría largos, y de éstos, diez vueltas al mundo. La primera de ellas entre agosto de 1928 y mayo de 1929, en sentido contrario al seguido por el galeón “Victoria” -la nave de J.S. de Elcanoen la primera vuelta al mundo en 1522-, doblando el cabo de Buena Esperanza, pero no el de Hornos, ya que regresó por el canal de Panamá.
Hay que destacar que en estos más de ochenta y cinco años de vida, el “Juan Sebastián de Elcano” ha recorrido mares y océanos con más de un millón seiscientas mil millas náuticas navegadas. Ha entrado en 197 puertos de 70 países diferentes, con un total de 1.148 visitas.
De todos ellos, los más visitados de nuestro país, como era de esperar, han sido Cádiz (provincia donde el buque tiene su base), Marín (como sede de la Escuela Naval Militar) y las dos capitales de las islas Canarias, por ser el archipiélago el punto de partida frecuente previo a adentrase en el Atlántico rumbo a las Américas. De los puertos europeos el más visitado ha sido Lisboa y en el continente americano, Nueva York.
Por último, citar que el casco del buque es de hierro y arbola cuatro palos: “Blanca”, “Almansa”, “Asturias” y “Nautilus”, cuyos nombres recuerdan a otros buques escuelas que le precedieron.
La dotación del "Juan Sebastán Elcano" está compuesta por 197 hombres y mujeres. En total 24 oficiales, 22 suboficiales, 39 primeros, 107 cabos y marinos, y 5 civiles. Todo este personal se ha formado previamente en centros.
Fotos:
* Pintorest.
* Antonio Sánchez Díaz.
* Baldallur. (Respectivamente).
www.armada.mdes.es
Para la construcción de esta Catedral de Santa Cruz de Cádiz, conocida vox populis, como Catedral Nueva, se elige al arquitecto Vicente Acero en 1721, quien diseña un espectácular templo barroco, con planta de Cruz latina, tres naves y girola en cabecera, inspirada en la Catedral de Granada, de Diego de Siloé. La genialidad del autor consiste en fundir la tradición de las grandes catedrales españolas con las formas procedentes del Barroco Italiano. Así la planta es de origen gótico, con potente girola y participa del rico movimiento de lineas propio de Borromini y Guarini.
Hasta 1729 las obras las conduce Acero siguiendo su atrevido proyecto, que preveía sus dos torres de fachada y su cúpula sobre el Crucero con unas dimensiones colosales. El Cabildo no aprobó la continuidad de su obra y lo destituyó de su cargo.
Le sucedió Gaspar Cayón, y en 1759 su sobrino, Torcuato Cayón de la Vega, arquitecto local que marca la trasición del barroco al neoclásico en la zona, reformando parte de la fachada y alzados y acortando la altura prevista de cúpula y torres a las que coronó de estatuas, al gusto francés.
Cuando fallece en 1783, falta por concluir parte de las bóvedas y la cúpula, casi la tercera parte del total, sucediéndole, Miguel Olivares.
Por diferencias técnicas sobre cómo continuar las obras, el Cabildo consultó con la Real Academia de S. Fernando de Madrid, por lo que el rey Carlos IV, en 1790, declarado protector de las mismas nombra a Manuel Machuca director de las obras. En 1796 se paraliza todo. Acontecimientos de enorme transcendencia para el país. La Guerra de la Independencia, las Cortes Generales y Extraordinarias, y la restauración del Régimen Absolutista de Fernando VII, Incluido el paréntesis del Trienio Leberal.
Finalmente, por razones económicas se reduce el presupuesto y Juan Daura reanuda las obras en 1832, dándose por acabadas en 1853.
Está diseñada para que lo último que podemos ver al partir desde la hahía es precisamente la Catedral de Santa Cruz sobre las Aguas (nombre completo).
Está catalogada como Bien de Interés Cultural.
Nota:
Ya la vista exterior es una verdadera joya. En mi opinión, aún mayores tesoros artísticos se encuentran en su interior, no se los pierdan si tienen esa oportunadad, seguidores.
Cadizpedia.
Foto: internet.
Catedral de Cádiz. |
Para la construcción de esta Catedral de Santa Cruz de Cádiz, conocida vox populis, como Catedral Nueva, se elige al arquitecto Vicente Acero en 1721, quien diseña un espectácular templo barroco, con planta de Cruz latina, tres naves y girola en cabecera, inspirada en la Catedral de Granada, de Diego de Siloé. La genialidad del autor consiste en fundir la tradición de las grandes catedrales españolas con las formas procedentes del Barroco Italiano. Así la planta es de origen gótico, con potente girola y participa del rico movimiento de lineas propio de Borromini y Guarini.
Hasta 1729 las obras las conduce Acero siguiendo su atrevido proyecto, que preveía sus dos torres de fachada y su cúpula sobre el Crucero con unas dimensiones colosales. El Cabildo no aprobó la continuidad de su obra y lo destituyó de su cargo.
Le sucedió Gaspar Cayón, y en 1759 su sobrino, Torcuato Cayón de la Vega, arquitecto local que marca la trasición del barroco al neoclásico en la zona, reformando parte de la fachada y alzados y acortando la altura prevista de cúpula y torres a las que coronó de estatuas, al gusto francés.
Cuando fallece en 1783, falta por concluir parte de las bóvedas y la cúpula, casi la tercera parte del total, sucediéndole, Miguel Olivares.
Por diferencias técnicas sobre cómo continuar las obras, el Cabildo consultó con la Real Academia de S. Fernando de Madrid, por lo que el rey Carlos IV, en 1790, declarado protector de las mismas nombra a Manuel Machuca director de las obras. En 1796 se paraliza todo. Acontecimientos de enorme transcendencia para el país. La Guerra de la Independencia, las Cortes Generales y Extraordinarias, y la restauración del Régimen Absolutista de Fernando VII, Incluido el paréntesis del Trienio Leberal.
Finalmente, por razones económicas se reduce el presupuesto y Juan Daura reanuda las obras en 1832, dándose por acabadas en 1853.
Está diseñada para que lo último que podemos ver al partir desde la hahía es precisamente la Catedral de Santa Cruz sobre las Aguas (nombre completo).
Está catalogada como Bien de Interés Cultural.
Nota:
Ya la vista exterior es una verdadera joya. En mi opinión, aún mayores tesoros artísticos se encuentran en su interior, no se los pierdan si tienen esa oportunadad, seguidores.
Cadizpedia.
Foto: internet.