sábado, 11 de enero de 2014

EXPOSICIÓN IBEROAMERICANA DE SEVILLA, 1929

Ofrezco a todos mi seguidores un valiosísimo documento historico sobre la Sevilla de la Exposición Iberoamericana del 1929. Disfruten y admiren.

Si los autores de esta joya no desean que se mantenga en mi blog, lo suprimiré tan pronto me lo pidan, respetando su criterio, naturalmente, pero opino que sería una pena vetarlo.

El autor de este magnifico documento histórico es:

Juan José Cabrero Nieves, cuyo blog es:

exposicioniberoamericanadesevilla1929.blogspot.com




Mari Carmen.






 Frente a los pabellones de Colombia y Protectorado de Marruecos, y entre el acceso al Parque de Atracciones por esta avenida y el Pabellón de la Perfumería Calber, se encontraba el Pabellón que la Sociedad Nestlé construyó para mostrar sus productos en la Exposición Iberoamericana.

Situado en una parcela de unos 1.000 m2, el edificio se componía de un núcleo central formado por un prisma octogonal de dos plantas de altura. A este núcleo central, se le había adosado un cuerpo rectangular, el cual realizaba las funciones de chaflán en el ángulo de intersección de las dos avenidas. Sobre este cuerpo se habían superpuesto una pirámide truncada de la que se elevaba un alto y esbelto pedestal con planta en forma X, que a manera de torre, servía de reclamo sobre el que reposaba el logotipo de uno de los productos mas vendidos de esta firma como era la leche condensada “La Lechera”.




Vistas aéreas desde dos ángulos distintos del pabellón durante su construcción y una vez concluido, y situación del mismo entre la Puerta de Moliní de acceso al Parque de Atracciones y el Pabellón Calber, y frente a los pabellones de Colombia y Protectorado de Marruecos. (foto izquierda Archivo fotográfico de Nestlé)

De este cuerpo central, salía por uno de sus lados, un brazo o ala que se alargaba hasta alcanzar la puerta de entrada al Parque de Atracciones y en cuyo extremo se encontraba una escalera de acceso a la cubierta de esta zona, dispuesta como galería-mirador, que a la vez servía de entrada a la planta superior del edificio central; esta galería se decoraba con pérgolas. En otro de los lados, se habían instalado también unas pérgolas con emparrado, a modo de una larga marquesina que recorría el camino de acceso por esa zona.

Según un pequeño rótulo que se encontraba en la entrada del pabellón, su autor fue el arquitecto catalán José María Ros Vila, gran amigo de Pedro Muguruza el cual diseñó también el Pabellón de Horacio Echevarrieta para la Exposición, encargándose de su construcción Luis Baixeras, que en ese momento también se encontraba levantando el Pabellón de la Diputación de Barcelona en la Muestra hispalense.

El edificio estilísticamente está ya en la línea del movimiento moderno, enfrentado claramente a la corriente oficialista de la arquitectura del Certamen, presentando la iniciativa privada una clara apuesta por la modernidad que, aún no siendo un ejemplo de arquitectura del siglo XX, si muestran el camino que había tomado las nuevas construcciones.




Pabellón de Turismo de la Exposición de Artes decorativas de París de 1925, azotea de los Almacenes JORBA en Barcelona, azotea del Hotel Cristina de Sevilla.
Podemos observar como el autor se inspira en el Pabellón de Turismo de la Exposición Internacional de Artes Decorativas e Industriales Modernas, celebrada en París en 1925, realizado por los arquitectos Robert Mallet-Stevens y Charles Garrus, al tomar de éste el elevado pedestal, a modo de torre, desde donde se proclama a las cuatro vientos la figura inequívoca de la marca de la leche condensada. El citado Pabellón de Turismo también fue fuente inspiradora para el diseño del pabellón de productos de perfumería GAL obra del arquitecto Vicente Sáenz y Vallejo.

Las líneas simples de la decoración exterior, resaltaban la funcionalidad de la arquitectura, rozando con el racionalismo; sin embargo estas se rompía con la utilización de pérgolas, sobre todo en la galería-mirador, de la cubierta del ala del brazo izquierdo, que recuerda de alguna manera a la decoración utilizada en la azotea de los barceloneses almacenes JORBA, o a la parrilla del primitivo Hotel Cristina de Sevilla.



Dos perspectivas del Pabellón de la Sociedad Nestlé. (Archivo fotográfico de Nestlé)


Esta empresa alimenticia fundada en Suiza en 1866 por Henri Nestlé, llega a España en 1905, y su presencia se inicia con la inauguración de la fábrica de La Penilla en el Valle de Cayón, en Cantabria, empezando ese mismo año la producción de su famosa harina lacteada Nestlé, compuesta de leche, azúcar y harina de trigo, ya en 1910 se inicia la producción de leche condensada La Lechera.

Diez años mas tarde, en 1920, se constituyó oficialmente en Barcelona la Sociedad Nestlé, Anónima Española de Productos Alimenticios, estableciendo delegaciones en Madrid, Santander, Valencia, Sevilla y Bilbao. Nestlé poseía el título de "Proveedora oficial de la Real Casa", por lo que podía utilizar el escudo de armas de la Casa Real en las facturas y etiquetas de sus productos.

El Pabellón visto desde otro ángulo. (Archivo fotográfico de Nestlé)
En enero de 1929, Nestlé y Chocolats Suisses S.A. se fusionaron dando como resultado una nueva sociedad con trece centros de producción de chocolate en todo el mundo, entre los cuales se encontraba el de La Penilla, inaugurándose oficialmente la nueva línea de producción.

En 1930, tuvo lugar la fusión con la Sociedad Lechera Montañesa, empresa que había ofrecido una dura competencia desde 1926 comercializando su propia leche condensada y su harina lacteada, y que también estuvo presente en la Exposición, con su pabellón de leche condensada “El Niño”

A pesar de la escasa información que tenemos de este pabellón y sus contenidos, sabemos que se mostraban las distintas variedades de productos que fabricaba esta firma dedicada a la alimentación, como era además de la leche condensada “La Lechera” la harina lacteada NESTLE y los chocolates Nestlé, Peter, Cailler y Kohler. Así como datos y sistemas de producción de estos productos manufacturados por esta empresa.



Imagen de uno de los escaparates con que estaba dotado el pabellón. (Archivo fotográfico de Nestlé)

En el salón octogonal del cuerpo central, se encontraban expuestas la gran variedad de productos que esta Sociedad confeccionaba, en uno de los lados a modo de stand, se reproducía un paisaje de montaña, donde figuraba una vaca a tamaño natural, que daba realismo a la escena. De este salón partían las entradas a otras dependencias, como eran las de información y recepción.

En el lado correspondiente al chaflán se encontraba instalada la caja de escalera que daba acceso a la planta superior, donde se ubicaba un salón de degustaciones gratuitas y conferencias y en el que a los visitantes se les distribuían muestras de sus afamados productos, a la vez que servía para realizar demostraciones de las diferentes aplicaciones culinarias que tenían la utilización de la leche condensada “La Lechera”. 



Tres vistas del salón central, donde se exponían los productos de la marca, en uno de los lados, la caja de escalera de acceso al piso superior y en otro, stand con la representación de un paisaje de montaña. (Archivo fotográfico de Nestlé)


Dos imágenes del salón de conferencias y degustaciones del piso superior, con el público preparado para presenciar una demostración de las aplicaciones que tenía la leche condensada “La Lechera”. (Archivo fotográfico de Nestlé)

En las fachadas del edificio, se instalaron siete escaparates donde se mostraban la gran variedad de artículos y productos fabricados. Y distintos personajes representados por muñecos mecánicos, que hacían las delicias de la gente menuda y de los mayores, por los gestos y movimientos de estos autómatas, reclamando la atención de los visitantes y ofreciendo los artículos expuestos. Son tres las figuras de estos autómatas fabricados en Alemania, se pueden hoy día contemplar en el Museo de Autómatas del Tibidabo en Barcelona, aunque estos datos están por confirmar.



Algunos de los autómatas que estuvieron como atracción en el pabellón y actualmente en el Museo de Autómatas del Tibidabo.

Se tratan de los personajes correspondientes al Tío Paco, de 1,80 m de altura situado en la entrada del Museo desde donde anima a los visitantes a entrar. Las Comadres, dos señoras en animada conversación, y Los Labradores, consistentes en una pareja (hombre y mujer), en el que el labrador lleva en la mano derecha un bote de leche condensada “La Lechera”. Parece ser que estos tres personajes formaban parte de una amplia colección de ellos, que viajaban por el país promocionando los productos de la casa Nestlé, cambiando de indumentaria dependiendo del lugar donde se encontraran



Imagen del Pabellón Nestlé iluminado.

El edificio se iluminaba por la noche de forma artística como lo demuestra la instalación eléctrica con que estaban dotadas las pérgolas, el perfil del alero que recorría el contorno del edificio, y el alto pedestal y el logotipo de “La Lechera” colocado en su cima.

Desconocemos la fecha de la apertura del pabellón, aunque parece que debió estar concluido para la inauguración de la Exposición ó al menos en fechas próximas a ella, ya que en un escrito de los servicios de la organizadora de 2 de marzo de 1929, aparece en una lista de pabellones que ya estaban terminado o a punto de finalizar su construcción, y pasado dos meses, se le pedía procediera a la limpieza y retirada de materiales del exterior del pabellón. Sí tenemos constancia de la visita realizada por las Infantas Dª Cristina y Dª Victoria y del Infante D. Jaime a este edificio, en el que recorrieron sus instalaciones y fueron obsequiados con una selección de los productos expuestos.



Visita de las Infantas Dª. Cristina y Dª. Victoria, y el Infante D. Jaime al pabellón.

Fue distinguido este pabellón con el Gran Premio de la Exposición, y a primeros de agosto de 1930, le fue ofrecido este edificio de la Sociedad Nestlé al Ayuntamiento de Sevilla, expresando la Corporación municipal la correspondiente gratitud a la dirección de la empresa. Previamente, el 4 de julio de dicho año, en un informe remitido al Secretario General de la Exposición por parte de la Oficina Técnica, aparece como uno de los edificios que, a pesar de haber sido construido con carácter provisiona, por el tipo de su construcción podían quedar como permanentes. No obstante, hay constancia de que en el mes de mayo de 1933 ya se había producido su derribo.

Puerta principal al edificio, al fondo la escalera de acceso a la galería-mirador, junto a la puerta rótulo con el nombre del autor del edificio.





Pérgola en uno de los lados del pabellón. (Archivo fotográfico de Nestlé)


La Sociedad Nestlé, estuvo también presente en la Exposición Internacional de Barcelona con un bello pabellón, siendo la única firma de su ramo, que había participado en ambos eventos con edificios propios.

Pabellón Nestlé en la Exposición Internacional de Barcelona.

FUENTES

- Información municipal. ABC Sevilla. 10 Agosto 1930. Pág. 27

- Un nuevo pabellón en la Exposición de Barcelona. La Voz. 03 Septiembre 1929. Pág.4

- Un nuevo pabellón en la Exposición de Barcelona. El Sol. 04 Septiembre 1929. Pág.4

- Nuevo Mundo. 24 Mayo 1929. Pág. 55. Publicidad de Nestlé.

- Archivo Fotográfico de la Sociedad Nestlé.

- Arquitectura para una exposición: Barcelona 1929. Carmen Grandas Sagarra. Artigrama, núm. 21, 2006

- Nestlé también tuvo su pabellón.
http://esasevilla.blogspot.com.es/2010/11/nestle-tambien-tuvo-su-pabellon.html

- Nestlé en España. Historia
http://www.empresa.nestle.es/es/sobre-nestle/nestle-en-espana/historia