martes, 5 de marzo de 2013

8 DE MARZO

Estas son mis matemáticas preferidas




Mismo trabajo y rendimiento= sueldo y oportunidades.


Casi todos  coinciden en que son teligentes muy sexys. Pero la autentica respuesta la da un escritor sudamericano de 63 años, Santiago Gamboa...espero que disfruten la lectura.

-"Las mujeres de mi generación son las mejores. Y punto. Hoy tienen cincuenta y pico, incluso sesenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero, sobre todo, comprensivas, serenas, sensatas, especialmente seductoras, esto a pesar de las incipientes patas de gallo o de esa afectuosa celulitis, pero que las hacen tan humanas, tan reales. Hermosamente reales.

Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas y vueltas a casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento...que a veces es un modo de acercarse al tercero...

Otras, las menos, mantienen una pertinaz sotería y la protege como ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada tanto tiempo abre sus puertas a algún visitante que ella quiera.

Nacidas bajo el influjo de la música de Bob Dylan, Los Beatles, Triana, Los Relámpagos...herederas de la "revolución sexual", de los años 60-65, y las corrientes feministas que, sin embargo recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad con coquetería, emancipción con pasión, reivindicación con seducción.           

Jamás vieron en el  hombre a un enemigo, cuando se les muestra respeto, a pesar que les cantaron unas cuántas verdades, pues comprendieron que emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando se acaba o dar la comida al bebé... y decidieron pactar para vivir en pareja el lema: -colaborar en vez de "ayudar"; lo primero es concreto y tiene el valor del compromiso mutuo, lo segundo es eventual "generosidad."


Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando tengamos nuestras discusiones.          

Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con suéter de lana en una noche loca. Hablaron con pasión de política y quisieron cambiar para mejorar el mundo. Hay algunas razones de por qué una mujer de más de 50 años nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte ...-"Qué estás pensando"-? No les interesa lo que estás pensando.

Si una mujer de más de 50 no quiere mirar un partido de fútbol, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer, por lo general, algo creativo e interesante. Una mujer de más de 50, se conoce lo suficiente como para estar segura de sí misma, de lo que quiere y de con quién lo quiere.

Una mujer de más de 50, tiene cubierta su cuota de relaciones y compromisos importantes. Lo último que quiere en su vida es otro amante posesivo. 

Las mujeres de más de 50 son generalmente generosas en alabanzas merecidas. Ellas saben muy bien lo que es no ser valoradas y consideradas lo suficiente. Tienen la necesaria seguridad en sí mismas como para presentarte a sus amigas. Solo una mujer joven e inmadura puede llegar a ignorar a su mejor amiga.

Las mujeres se vuelven psíquicas a medidas que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecadillos, ellas siempre lo saben. Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un imbécil, si te portas así.

Hay muchas cosas buenas que decir de las mujeres de más de 50 y por múltiples razones. Lamentablemente no es frecuente lo recíproco. Por cada mujer de más de 50, inteligente, divertida, creativa y sexy, hay un hombre que cuestiona su valía, iniciativas y capacidad, de más de 55, pelado, barrigón, haciéndose el gracioso con una chavala de 20 y haciendo el completo ridículo, e incluso menos que su hija, (siempre sin generalizar)...pero haberlos, haílos...    

En igualdad, compartir todo en la vida.