sábado, 10 de noviembre de 2012

RELATO BREVE

                          




"RECUERDOS DE LA INFANCIA"

¿Quién no recuerda con cierta frecuencia la niñez?
Pues yo no iba ser de menos, ¡Ni mijita!

De niños, una pelota, un cordel para saltar a la comba, unas canicas, un lápiz y un pedacito de papel, una tiza para pintar y un trocito de piedra, jugar al "tejo", un yoyó, con el cual nos gustaba demostrar las destrezas a los amigotes... no nos poníamos rodilleras para ir en bici, eso nos parecía una mariconada y cursilería, nos íbamos a la calle o al parque, en verano, a la Caleta gaditana...

Los libros que sacábamos de la biblioteca me llenaban de fantasía y vivía mil aventuras todo el fin de semana. Los viernes, a media tarde, poníamos en orden el mundo con los amigos ¡Era una delicia y estupendo el debatir! Buscábamos una posible conclusión, respetando el turno, y aportando nuestras capacidades para "arreglar el mundo". No éramos desdichados y el cariño de la familia, compensaba ciertas dificultades a superar.

Definitivamente, los tiempos han cambiado hoy en día hay niños que aprenden a decir: "actividades de estímulación" o "taller creativo" "estoy pasando por una angustia vital", antes que decir sencillamente: "papá o mamá". Resulta difícil pedirles que observen las nubes navegar por el cielo o a una hormiga desfilar entre la hierba, oír los sonidos de la naturaleza: el campo, la mar, el amanecer en tu ventana... también en enseñarles a tomar las cosas con la serenidad apropiada aunque es absurdo esperar que su ritmo de vida no sea tan acelerado, creo  que haríamos bien en enseñarles a tomar las cosas con la serenidad apropiada, a soñar y a meditar, que nadie está en la verdad absoluta. Ser tolerantes y comprensivos, que la amistad es un enorme valor cuando es verdadera, aceptando y respetando al amigo/a tal como es, aunque pueda resultar brusco y con genio, (yo prefiero a una persona así, me parece que es integra y la "veo venir", antes que a las "mosquitas muertas")
...así no se aburrirían.

En la actualidad, donde el trabajo, y la preocupación por él, los bienes de consumo, las actividades recreativas, (los que puedan), ocupan la mayor parte del tiempo, valdría la pena considerar lo anteriormente dicho...

Los recuerdos son buenos y grandes maestros... 
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Mi solidaridad y apoyo a los que la monstruosa crisis está destrozando sus vidas y el futuro de nuestros hijos, desde la esperanza, saldremos adelante, eso sí, TODOS UNIDOS A REIVINDICAR nuestros derechos fundamentales, que no se trata de ningún privilegio ni regalo.
Es lo merecido por la aportación y sacrificios de toda una vida, la lucha que nos costó tanto, tanto, tanto...
Un fuerte abrazo.













                                                                    Debate en clase.